viernes, 28 de marzo de 2008

La cita

Caminas por la orilla, cantas tu canción predilecta y cuentas tus monedas de otros planetas.
Te veo y te ruego que apagues la radio, sus acordes me torturan y tú música favorita me enferma.
Veo el mar y le ruego que me deje ahogar en sus aguas profundas.
Para él nunca aprendí a nadar.
Mojo mis pies en busca del suicidio y tu cielo se apaga.
Buscas en la arena húmeda tus monedas y maldices que alguien con M haya pensado en tí.
Tenía cita con la sabiduría en ese momento, se iba a vestir de negro para mí. Sin embargo, prefiero ayudarte a buscar.
Tenía planeado ahogarme en el agua pero ahora me hundo en la arena.
Coges mi mano y se deshace mi piel.

Tranquila, las encontré ya puedes mirar las estrellas.
De una forma u otra cuplí con la cita.

martes, 25 de marzo de 2008

es casi el final

yo quise conocer tu mundo
porque pensé que ya te conocía...

y, de repente, dejé de escuchar tu voz,
te prohibiste pronunciar mi nombre,
el verano se olvidó del calor
y el viento, lentamente, dejó de existir.

jueves, 20 de marzo de 2008

21 pliegos de cordel

entre dispar amor y tanta muerte,
mi cuerpo seguro lleno de feniletilamina,
parece una anfetamina con sed de infinito.

y recuerdo que tu cuerpo lleno de conocimiento
era una vía sentimiento puro, fe,
y del clímax de las bellas artes.

cada paso, más sed de libertad de la finitud
cada medida del tiempo,
más pasos acelerados.

parecíamos el uno y el todo,
pero nunca con esa armonía del amor.
esa misma armonía que sólo es idea.

la pensabamos después mi llegada
mirando el viejo ventilador que
amenazaba en venirse abajo y decapitarnos.

cada paso, más cerca que la muerte.
cada deseo, la posibilidad de convertir
la muerte en vida, la tuya y la mia.

si, nos autodestruímos y
transgredimos a la tragedia porque
esperamos renacer como el uno y el todo.

y en el piso, mientras agonizas de verguenza
yo dispararé mi última sentencia,
bueno, no son mis palabras
pero las repito para que vuelvan a tu cabeza:


"todas las pasiones terminan en tragedia, todo lo que es limitado termina muriendo, toda poesía tiene algo de trágico"
(por poesía entiende tu vida y la mía)

lunes, 17 de marzo de 2008

soneto a Stella Maris

lo sabes, madre naturaleza, diosa emperadora del mundo;
ya no quedan ni cenizas ni leyendas de tus reinados.
solo sueños sobre la armonía que encontraba en tu locura,
cien sonetos, una canción y la destrucción insumisa.

te enojabas y volvías a sonreír, te enojabas sonriéndo;
pequeña salvavidas anarquista, corazón rebelde, tierna;
no tenías por qué ponerte celosa, Stella,
yo no miraba al paisaje; era tu reflejo en el cristal.

decías que no valía la pena, pero la pena ahora me envenena;
me enveneno y vuelvo a soñar despierto, lo siento.
Stella, tu nombre empieza con "V" y termina con fuego.

cómo me gustaría poder decirte adiós,
y que sientas a una pequeña araña susurrarte un hasta luego,
desearte que te vaya bien en tu vuelo y en todo lo demás.

viernes, 14 de marzo de 2008

Súcubo

Me encanta verte mal
Escuchándote pronunciar palabras incomprensibles
Producto de tus viciosos amoríos
Así es, grita
Aunque lo hagas sigo sin entenderte, tu lengua no es de este mundo
A pesar de tus ruegos, no tocaré tu leprosa piel
Y si te lo preguntas, tengo miedo de acercarme
Asco de lo que veo y miedo de lo que hicimos
Pequeña Súcubo sólo me queda reír
Porque te veo lamer tus heridas con desesperación
Y tú bien sabes que no existe cura
Aunque claro, tu lengua no es de este mundo
Te tomaré una foto
Y si quieres taparte el rostro con las manos, juro te las cortaré
Posa
Vamos, sabes que no te tengo lástima
Posa, esperaré que se te acalambre la sonrisa
.
.
.
Las guardaré donde todos puedan verlas
Búscate un mejor disfraz Súcubo, el que tienes se desgarró

martes, 11 de marzo de 2008

sigue soñando con Stella Maris

deberías estar durmiendo, o por lo menos tratar de hacerlo,
y no tratar y tratar de escribir sobre cielos platónicos en campos elíseos
cuando está nublado en tu torre de babel.

recuerdo como llegábamos a la resaca y, ya ebrios, me llamabas Stella Maris.

miércoles, 5 de marzo de 2008

Con V de veneno

Van tres gotas y la decisión no cuaja

Vienen tres bocaradas y no hay marcha atrás


Vacilantes palpitaciones

Vidriosos ojos

Voces extrañas

Visiones psicodélicas


- Ven conmigo